MITO DE LA LUNA
Dariana era una diosa muy hermosa, hija de Nyx y Zeus, se le consideraba
reina de la noche y la oscuridad.
Su cabello plateado relucía en la oscuridad, su piel era tan blanca como
la nieve, por lo que resultaba ser la envidia de todas las diosas.
Representaba el optimismo, era una mujer que hacía lo imposible por
conseguir lo que deseaba. Además, tenía todos los conocimientos y habilidades
para conseguir lo que se proponía.
Cierto día, Dariana se encontraba recogiendo fruta en las orillas del
río, cuando de repente se topa con Oneiro dios de los sueños, hijo de Nyx sin
intervención de algún hombre. Quedó perpleja por su belleza, pero trató de
mantenerse alejada, no quería que se diera cuenta que ella se encontraba ahí.
Dariana no dejaba de pensar en Oneiro, cada noche buscaba la forma en
acercase a él sin que se él se espantara. Subió al olimpo a pedirle ayuda a su
mamá Nyx, le mencionó quien era aquel bello joven del cual se había enamorado.
Nyx le dijo a su pequeña hija que ese bello joven del cual estaba muy
ilusionada, era su hermano Oneiro. Dariana sorprendida por aquella confesión le
preguntó por qué no le había contado de aquel hijo. Nyx le explicó que Oneiro
no quería saber la existencia de ella pues no creía que él no podía tener un
padre y su orgullo hizo que se alejase de ella.
Dariana lloró día y noche por el amor no correspondido, formando una laguna
de bellas aguas, la laguna donde Narciso más adelante moriría.
Zeus, viéndola muy desconsolada, le ofreció a Dariana un deseo, para que
no siguiera triste. Ella lo pensó bien y le dijo a su padre que deseaba con
toda su alma, observar a Oneiro cada noche, pues era el mejor momento en el que
éste no notara su presencia.
Y así fue, Zeus elevó su alma al firmamento, convirtiéndola en una hermosa
luna plateada que alumbraría la noche y pudiese observar a su bello joven
Oneiro.
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